Aprendimos de los campesinos de Santiago del Estero que todo está atado a todo... y que las cosas no se pueden hacer a cualquier costo.

Los campesinos dicen “No podemos destruir la tierra, el aire y el agua, porque aunque no se cual será tu destino, se que de alguna manera estoy atado a tu destino” America Latina está plagada de cementerios,los que dejó la explotacion del oro y la plata, el cacao y el caucho, el cobre y el quebracho, el banano y la caña de azucar...

La fiebre de estos productos levantó ciudades hoy convertidas en tugurios por los que deambula gente entre el hambre y la desesperación. Los promotores del espejismo cuando no hay más nada que saquear se van a la búsqueda de nuevas tierras promisorias bajo gobiernos corruptos. ¿Acaso será distinto en Uruguay cuando ya no haya más pulpa de celulosa que explotar, las tierras mas fértiles se hayan desertizado y los ríos estén envenenados?Insensatos no queremos oir, ni pensar....

Continuaremos repitiendo que es MEJOR morir contaminados y no de hambre? ¿Seguiremos demonizando a quienes decididamente vienen denunciando desde hace ya diez años-en un país que se ha vuelto sordo-los estragos que está haciendo el monocultivo de eucaliptus que está cubriendo de falsos árboles aquellas verdes praderas..?

Los intereses económicos son al parecer insoslayables y nuestros gobernantes (Tabare Vazquez y Nestor kirchner) una mera Junta de intermediarios de capitales locales y el gran capital internacional. Censuraron las voces de quienes serán los primeros afectados por estas plantas de gigantescas chimeneas, la gente que vive sobre las márgenes del Rio Uruguay, uruguayos y argentinos. Esa gente luchó como pudo para hacerse oír.

Fueron difamados a través de una campaña impulsada por el gobierno y coreada por los politicos de todas las tiendas politicas, la mayoria de los medios de comunicación y hasta la misma central sindical uruguaya, unidos como un solo hombre para defenderles el negocio a dos megaempresas.

Tendremos papeleras y habrá trabajo chatarra durante un par de años.... Y después?

Estas palabras acompañan un programa sobre Forestación realizado en 1997 y una entrevista realizada en los primeros dias de marzo de 2006 con Carlos Di Pascua. Una lucha contra los molinos de viento....